lunes, 29 de diciembre de 2014

El Renacimiento en la Comarca de la Comunidad de Calatayud. Pintura y escultura.



AUTOR:

Criado Mainar, Jesús

EDICIÓN:
Editado por:
IFC-CEB
Edición:
299 p., il., 17x24 cm, ISBN 978-84-7820-959-0
Año edición:
2008
COLECCIÓN:
Centro de Estudios Bilbilitanos
Nº PUBLICACIÓN:
2808
PRECIO:
10,00 €
MATERIAS:

INFORMACIÓN ADICIONAL:
La extensa Comarca de la Comunidad de Calatayud es un territorio excepcional para el estudio de las artes plásticas del Renacimiento, dado que sus localidades conservan un verdadero tesoro de piezas de escultura, pintura, orfebrería y ornamentos sacros realizados en dicho período cuyo estudio permite seguir de modo puntual los principales cambios de gusto o estilo que se dieron en esa época. El presente trabajo se centra en el análisis de las más notables piezas de escultura y pintura que se hicieron aquí desde los pimeros años del siglo XVI hasta 1610. Entre los artistas responsables de su ejecución figuraron nombres tan destacados cmo Esteban de Obray, Gabriel Joly, Alonso de Villaviciosa, Damián Forment, Juan de Moreto, Juan Martín de Salamanca, Pietro Morone, Pedro Martínez el Viejo, Jaime Viñola o Felices de Cáceres.


Castillos de la Comunidad de Calatayud



AUTOR:

Guitart Aparicio, Cristóbal

NOTAS:
Presentación de Guillermo Fatás Cabeza.
EDICIÓN:
Editado por:
IFC-CEB
Edición:
180 p., 96 il. (82 en color), 1 map., 17x24 cm.
Año edición:
2004
COLECCIÓN:
Centro de Estudios Bilbilitanos
Nº PUBLICACIÓN:
2472
PRECIO:
10,00 €

Calatayud, otra mirada


AUTOR:

Macipe Roy, Jesús

EDICIÓN:
Editado por:
IFC-CEB
Edición:
76 p., il., 21x30 cm, ISBN 84-7820-705-8
Año edición:
2003
Nº PUBLICACIÓN:
2381
PRECIO:
No venal

Juan Fernández de Heredia. Encuentro homenaje





















AUTOR:



Muñoz Jiménez, María Isabel; Sanmiguel Mateo, Agustín; Sarasa Sánchez, Esteban

NOTAS:
Para obtener más información sobre esta publicación puede dirigirse al Centro de Estudios Bilbilitanos, filial de la Institución «Fernando el Católico».
EDICIÓN:
Editado por:
IFC-CEB
Edición:
120 p., 39 il., 17x24 cm, ISBN 84-7820-488-1.
Año edición:
1999
COLECCIÓN:
Centro de Estudios Bilbilitanos
Nº PUBLICACIÓN:
2033
PRECIO:
No venal
MATERIAS:
HISTORIA > Historia medieval

INFORMACIÓN ADICIONAL:
Índice: Fatás Cabeza, Guillermo, "Don Juan", 2 p. Sarasa Sánchez, Esteban, "Juan Fernández de Heredia, consejero de reyes", 11 p. Muñoz Jiménez, María Isabel, "Actividad literaria de Juan Fernández de Heredia", 23 p. Muñoz Jiménez, María Isabel, "Iconografía de Juan Fernández de Heredia", 38 p., 27 il. Sanmiguel Mateo, Agustín, "La iglesia de Munébrega en tiempos de Juan Fernández de Heredia", 31 p., 20 il. Sanmiguel Mateo, Agustín, "Se conmemoró el VI Centenario de Juan Fernández de Heredia", 2 p.




Historia de la siempre augusta y fidelísima ciudad de Calatayud [tomos I y II. 2ª edición]


AUTOR:

Fuente, Vicente de la

NOTAS:
Presentación de Pedro Montón Puerto, Centro de Estudios Bilbilitanos.
EDICIÓN:
Editado por:
IFC-CEB
Edición:
2ª edición. 2 volúmenes. 1064 p., 1052 p. facsímile, 15 il., 15x21 cm, ISBN 84-00-06821-1
Año edición:
1994
COLECCIÓN:
Centro de Estudios Bilbilitanos
Nº PUBLICACIÓN:
1624
PRECIO:
No venal

sábado, 27 de diciembre de 2014

Guía del Museo de Santa María de Calatayud

Aunque el Centro de Estudios Bilbilitanos no ha intervenido en su elaboración, algunos de sus consejeros han participado en el proyecto, por eso y por su interés, nos hacemos eco de la presentación de la guía diáctica del Museo de Santa María de Calatayud.

La publicación puede verse en dos formatos: una página web que sirve de acompañamiento y complemento a la guía didáctica y la guía propiamente dicha que se ha editado en formato de libro y también en Internet.

Sus autores son: María José Arrizabalaga, Manuel Casado, Gloria Lecumberri y José Ramón Olalla.

La página web del Museo



La guía:

lunes, 15 de diciembre de 2014

INSPIRARTE

El Centro de Estudios Bilbilitanos,
de la Institución “Fernando el Católico”

y

AMIBIL

se complacen en invitarle a la presentación del libro:


INSPIRARTE

con poemas de:

Mariano Ramos Ruíz

e ilustraciones de:

José Javier Ibáñez Pablo, José Luís Llorente Nuño, José Antonio Morte Narvión, Manuel Ruiz Martín y Yolanda Tello Guajardo



que tendrá lugar el viernes 19 de diciembre de 2014, a las 19:00 horas
en el Salón Multiusos del Excmo. Ayuntamiento de Calatayud
(Plaza de Costa, 14)

En la presentación se pondrán a la venta los libros al precio de 6 €, importe que está destinado a AMIBIL. Las obras podrán adquirirse, a partir del día 22, en los puntos de venta de AMIBIL.


martes, 9 de diciembre de 2014

CANCIONERO DEL CAFÉ

CANCIONERO DEL CAFÉ

Francisco Tobajas Gallego

            El pasado 3 de diciembre en el Salón Multiusos del Ayuntamiento de Calatayud, tuvo lugar la presentación del libro de José Verón Gormaz, Cancionero del café. Pequeños poemas para leer y cantar, editado por el Centro de Estudios Bilbilitanos. El autor estuvo acompañado por Manuel Micheto, Presidente del Centro de Estudios Bilbilitanos, José Manuel Aranda, Alcalde de Calatayud, y María Aurora Lassa.



Manuel Micheto recordó que la colección poética del Centro de Estudios Bilbilitanos se había inaugurado en 1980, con la publicación del poemario Casi toda una vida y parte de la muerte, de Pedro Montón Puerto. Cancionero del café es la publicación número 127 del Centro de Estudios Bilbilitanos. José Manuel Aranda señaló que este año había sido el año de Pepe Verón, pues ha editado cuatro libros, ha sido nombrado Premio de las Letras Aragonesas y el Ayuntamiento de su ciudad le ha dedicado una calle.

            El libro de Pepe Verón  se abre con un interesante prólogo debido a José Luis Melero. En él escribe que un «poeta culto» como Pepe Verón se decidiera a escribir también poesía popular, «habla bien, a las claras de su condición de poeta singular y personalísimo, de su forma de ser y de estar en el mundo». Melero considera que esta decisión de Verón era valiente, pues podía poner en riesgo su «prestigio intelectual» en los cerrados, minoritarios y exclusivistas círculos literarios. Melero señala: «Solo quien sigue libremente su camino al margen de pautas establecidas, solo quien entiende que no hay poesía con mayúsculas y minúsculas, sino solo poesía buena y mala, está capacitado para tomar la decisión de trocar en algunos de sus libros la lírica culta por la lírica popular». Para Melero, José Verón es uno de los poetas aragoneses «más constantes, auténticos y personales». Todo en él «ha sido siempre de verdad» y no le importa demasiado lo que de él se diga en las academias y cenáculos de moda. El mismo Verón escribe en una copla de este libro: «Soy, como dijo Sender,/ un aragonés cabal,/ que come pan, bebe vino/ y que dice la verdad».

            Melero señala que Verón ha cultivado todo tipo de lírica popular, siendo un «consumado maestro» cuando escribe coplas poéticas, amorosas, ingeniosas o satíricas. Algunas de estas coplas ya se habían publicado en Cantos de tierra y verso, 2002. Para el primer tomo de La jota ayer y hoy, 2005, Melero incluyó una copla de Verón entre las cuarenta coplas escogidas, que compusieron Las cuarenta principales. Esta copla fue cantada por Yolanda Larpa e incluida en su disco Caminico de tu casa, 2009. Y dice así: «No quise marcharme fuera/ ni quise quedarme aquí;/ yo nunca he querido nada/ hasta que te conocí». Melero considera que con Miguel Ángel Yusta, Verón ha sido «el poeta culto que más afanes ha dedicado a la difusión de la copla en Aragón y ha jugado un papel esencial en la renovación de las cantas de jota». Esta trayectoria hace gala de su condición de bilbilitano, pues Calatayud ha sido una de las ciudades que más cultivadores ha dado a las coplas de jota, con Juan Blas y Ubide, Sixto Celorrio, Joaquín Dicenta, Jacinto del Pueyo, Justo Navarro Melero, Francisco Lafuente Zabalo, Ángel Genís, Narciso Pujalá, Pedro Montón, Juan Mendoza Nieto, José María Muñoz Callejero, Ángel Raimundo Sierra, Marcelo Catalá, María Pilar Zabalo, Lucio Manuel Sánchez, José María Malo, Ignacio Galindo del Hierro, David Julvez, Antonio Molina Esteban, Lucas Terrer y otros muchos más. Calatayud es también una ciudad jotera por excelencia por sus grandes cantadores, como Dámaso Salcedo, mi bisabuelo materno Hilario Gallego, Romualdo Arana, Emilio Arana, Manuel Navarro Rubio, Sara Comín, Yolanda Larpa y Nacho del Río, ganador de cinco Premios Extraordinarios en el Certamen Oficial de Jota.

             Para José Luis Melero, este libro de poesía popular de Verón no hace más que confirmar su opinión de que es «el mejor y más aventajado tataranieto de Marcial».

            Pepe Verón señaló que el punto de partida de este libro habían sido unas cuantas coplas publicadas en su libro Cantos de tierra y verso. Luego echó mano de sus libretas, en donde escribe versos mientras toma café por las mañanas. El poeta, además del buen café, siente predilección por la copla y los cantos de los indios chipewas, que le descubrió Ernesto Cardenal. Cancionero del café es una variada colección de coplas, aptas para todos los públicos. El libro esta dividió en tres partes. La primera acoge a poemas muy variados. Alguno de ellos se ha cantado con tonadas de jota. La segunda parte del libro homenajea a la jota aragonesa, con coplas que han sido cantadas por varios joteros y joteras. La tercera parte está dedicada al sur y a sus soleares, que tan bien cultivaron Antonio y Manuel Machado.

            Tras el autor, María Aurora Lassa, a quien va dedicado este libro, leyó el prólogo de José Luis Melero. A continuación Pepe Verón y Mª Aurora Lassa leyeron algunas coplas y soleares. Y para finalizar los joteros Antonio Sánchez y Yolanda Larpa cantaron algunas coplas del libro, acompañados a la guitarra por Juan Carlos.


            En 1732 Juan Sebastián Bach escribió la famosa Cantata del café, una sátira musical contra el vicio del café, que entonces estaba de moda entre los burgueses. En una mesa de un café, ante un buen café humeante y a la hora del café, Pepe Verón ha escrito un libro de fácil lectura pero de hondas emociones. El café da para mucho y bueno.

miércoles, 3 de diciembre de 2014

LOS JUDÍOS EN LA COMUNIDAD DE CALATAYUD

LOS JUDÍOS EN LA COMUNIDAD DE CALATAYUD


Francisco Tobajas Gallego


El pasado 26 de noviembre tuvo lugar una interesante conferencia del Dr. Abraham Haim en la Sala Multiusos del Palacio de la Comunidad de Calatayud, patrocinada por el Centro de Estudios Bilbilitanos, dedicada a los judíos en la Comunidad de Calatayud y especialmente a la figura de Luis de Santángel.



Hizo las presentaciones el Consejero del CEB, Antonio Sánchez Portero. Abraham Haim (Jerusalén, 1941) es Licenciado en Historia del Oriente Medio y Lengua y Literatura Árabes, por la Universidad Hebrea de Jerusalén (1965-1968), y Doctor en Historia por la Universidad de Tel Aviv (1985). Haim también fue Director General de Patrimonio Sefardí en el Ministerio de Educación y Cultura de Israel. Actualmente es Presidente del Consejo de la Comunidad Sefardí de Jerusalén, una organización que hunde sus raíces de su fundación en el siglo XIII y que durante siglos lideró a toda la comunidad judía. Abraham Haim está fuertemente vinculado a España. Su trabajo se enfoca en potenciar los temas culturales, con la preservación y la divulgación del legado sefardí, a través de ciclos de música, presentación de libros, concesión de becas…

Haim está dispuesto a recuperar la relación con las comunidades sefardíes que están fuera de Israel. Alrededor del veinte por ciento de los judíos del mundo son sefardíes. Abraham Haim está interesado en El Quijote, ya que Cervantes era un converso que había nacido en un pueblo de Sanabria llamado Cervantes. Haim ha encontrado en este libro una página del Talmud transcrita casi literalmente.

Abraham Haim señaló que había acudido como conferenciante a Calatayud por invitación de Antonio Sánchez Portero, a quien había conocido en Mallorca en diciembre pasado. Primeramente Haim quiso aclarar los términos judería y aljama, que se usan a veces erróneamente. Judería viene a designar el marco físico, o sea, el barrio judío. La palabra aljama, de origen árabe, define a un grupo de personas, en este caso a una comunidad que residía en la judería. Para el doctor Haim la etimología de Calatayud está clara. Calatayud quiere decir fortaleza de los judíos. Cada aljama judía era independiente y gozaba de un cierto grado de autonomía. En España esta autonomía de las aljamas judías era mayor que en otros países.

Abraham Haim señaló que los judíos poblaron estas tierras en el periodo de la dominación musulmana. En 1882 se encontró una lápida sepulcral en hebreo, hoy perdida, datada en el año 919, anterior pues a la conquista de estas tierras por el rey Alfonso I en 1120. El Fuero de Calatayud se mostraba respetuoso con los judíos. Los judíos eran súbditos del rey, que era quien les otorgaba derechos y deberes. Haim señaló que la aljama judía de Calatayud no fraguaría como tal hasta finales del siglo XII, poco después de la aljama de Zaragoza. Se situaba en la parte noroccidental de la ciudad, entre el conjunto defensivo de la Torre Mocha (Consolación) y de la Peña,  y se cerraba con cuatro puertas. Consideró que el siglo XIII fue la edad de oro del judaísmo aragonés. Los judíos eran artesanos y comerciantes. Se sabe que en 1340 vivían en la aljama de Calatayud 300 varones mayores de quince años. En el siglo XIV Calatayud contaba con 7.500 habitantes, de ellos 1.000 eran judíos. En 1391 se fecha el inicio del declive judío, con las matanzas de Sevilla, que llegará hasta 1492, con la expulsión decretada por los Reyes Católicos.

La aljama judía de Calatayud era la segunda del Reino tras la aljama de Zaragoza, con la que competía cultural y espiritualmente. La aljama de Calatayud, que llegó a considerarse gran aljama de hombres nobles, sensatos y selectos, llegó a ser muy famosa por su erudición talmúdica. Haim recordó que hasta un gran rabino de Zaragoza tuvo la intención de cambiar su residencia a Calatayud, por ser mayor su prestigio.

Haim trató también en su conferencia de la organización de la aljama judía de Calatayud, de su ampliación concedida por el rey y dio noticia de varios decretos reales relativos al nombramiento de cargos en ella. También señaló que la Inquisición no se estableció contra los judíos, sino contra las comunidades conversas al cristianismo que intentaban engañar a la Iglesia, pues en secreto seguían conservando los preceptos judíos. La Inquisición llegó a Calatayud en 1488. Los delatores se llamaban en hebreo malsín, palabra que recoge el Diccionario de la Real Academia Española, con este mismo significado. Entonces las aljamas judías acordaron que los gastos ocasionados por los diferentes procesos de la Inquisición sobre los judíos, debidos a los delatores, se pagaran a cuenta de la aljama entera.

Haim recordó algunos apellidos de judíos bilbilitanos, como Lupiel, Constantin, Abayud… El médido Todos Ib ben David se llamó más tarde Juan Sánchez, antecesor  de Gabriel Sánchez, tesorero mayor del Reino de Aragón y consejero real, que fue decisivo en la expedición de Cristóbal Colón. Los judíos conversos cambiaban el nombre y el apellido.

La sinagoga más famosa de Calatayud o sinagoga vieja databa del 20 de septiembre de 1368. Tras la expulsión y el decomiso por la Corona en 1492, se transformó al culto con el nombre de Santa Catalina de Siena, hoy ermita de la Consolación. En las sinagogas había una tribuna o galería reservada a las mujeres. Haim no tiene noticias de sinagogas exclusivamente para mujeres. La sinagoga menor aparece citada junto al muro defensivo de la ciudad. La tercera sinagoga fue fundada por Juce Abencabra, luego judío converso con el nombre de Martín de Cabra. Se transformó en iglesia de San Pablo en 1415. Todas ellas fueron reconstruidas a finales del siglo XIV, tras la Guerra de los dos Pedros. Las sinagogas tenían centros asistenciales, horno y carnicería. El doctor Haim recordó que los judíos de Calatayud se vanagloriaban de tener una de las juderías más hermosas de Sefarad. Los judíos vivían en ella tan desparramados, que sólo podían acudían a la sinagoga los sábados y los días de fiesta.

Promovidas por los frailes franciscanos y dominicos, que eran grandes predicadores y conocedores de la Torá, se produjeron conversiones masivas de judíos entre los años 1413 y 1414. Se han contabilizado la conversión de más de tres mil judíos aragoneses, que provocaron la desaparición de varias aljamas. El Papa Luna propició la macro-catequesis de Tortosa (1412-1414), en la que participó Vicente Ferrer. Otra oleada de conversiones tuvo lugar a raíz del decreto de expulsión del 30 de marzo de 1492 de los Reyes Católicos. En él se daba de plazo hasta el 30 de junio para aceptar el bautismo o la expulsión. Haim señaló que el rey que dictó esta expulsión, Fernando el Católico, tenía ascendentes judíos de parte de su madre, Juana Enríquez. Muchos judíos bilbilitanos aceptaron el bautismo. Los que no lo aceptaron salieron desde Tortosa en barco rumbo a Italia, los Balcanes, Grecia, Asia Menor, Damasco y Tierra Santa. Otra parte de judíos regresó convertida. La influencia de Aragón se nota sobre todo en la parte de Salónica, en canciones, refranes y costumbres. Haim señaló que el pueblo judío ha sufrido muchas expulsiones, pero que cuando se habla de la expulsión en singular, todos saben que es la española de 1492. Sin embargo los judíos sefardíes no guardan ningún rencor a España y siempre la añoran. Por esta razón siempre mantuvieron la lengua, los alimentos y las costumbres. Nunca se sintieron ajenos a España. El mismo Haim recordaba el arroz con leche que le preparaba su abuela, el estofado de tercera o el pisto, que son sefardíes.

Según el doctor Haim, en los preparativos del primer viaje de Cristóbal Colón, el marino se basó en estudios de astrónomos judíos de Salamanca y Mallorca. Otro personaje importante en la expedición de Colón fue Luis de Santángel, nacido en Valencia, hijo de comerciantes judíos bilbilitanos. El 13 de septiembre de 1481 fue nombrado escribano de Ración. Su función principal en la corte de Fernando el Católico era la financiera. Santángel prestaba dinero al monarca, que después devolvería con cargo a diversas rentas. Luis de Santángel conoció a Colón en 1486. Fue él el que convenció a los reyes de permitir el viaje de Colón, sufragando él mismo los gastos de su fortuna personal y sin intereses, que ascendieron a más de un millón de maravedís. El doctor Haim señaló que sus libros manuscritos de cuentas se conservan en el Archivo de Simancas. La primera carta de Cristóbal Colón a la vuelta de su primer viaje no fue dirigida a los Reyes Católicos, como seguía lógico pensar, sino a Luis de Santángel.

La historia de los judíos parece resumirse con tres palabras de la misma raíz: encuentro, desencuentro y reencuentro. Las palabras y la presencia de Abraham Haim en Calatayud fueron sin duda un reencuentro emocionado entre viejos amigos.